¿Por qué aprender a vender?

Mucha gente tiene la percepción de que las ventas son una carrera difícil. Y sí, es cierto que puede ser de alto riesgo, ya que muchos trabajos en este ámbito son bajo comisión.

Pero déjame ofrecerte una perspectiva fresca: muchísimas personas viven cómodamente con un trabajo en ventas bajo comisión. Yo, personalmente, pasé una década en un trabajo bajo este esquema, y fue muy fructífero. Claro, saber manejar bien tus finanzas es clave (aunque ese es tema para otro blog).

Toda tu vida es una venta

Piensa en esto: cada vez que te presentas con los padres de tu pareja por primera vez y te hacen el famoso "interrogatorio", lo que estás haciendo es venderte a ti mismo. Estás mostrando quién eres y presentándote como tu mejor versión.

Esto pasa toda la vida: en tus relaciones personales, cuando intentas conquistar a una pareja, y especialmente cuando buscas un trabajo. Si no sabes venderte a ti mismo, que siempre será el mejor producto que ofrezcas (y el que más conoces), será difícil destacar si no tienes esa pasión y confianza en ti mismo, imagínate si intentas vender algo por lo que no tienes pasión ni conocimiento.

Aprender este arte es clave para abrir puertas y crear oportunidades en tu vida: desde conquistar a la persona que deseas, hasta conectar con una comunidad que eleve tu vida.

Más importante aún, saber venderte puede marcar la diferencia entre ser elegido para ese puesto tan deseado o pasar desapercibido. Todo es una venta.

En mi caso, he conseguido mis mejores trabajos gracias a mi carisma y confianza más que por mi currículum, aunque, por supuesto, también era competitivo. Y cuando llegó el momento de negociar sueldos y beneficios… bueno, ¡no tuvieron ninguna oportunidad conmigo! Jajaja.

La edad no importa en ventas

Las ventas son un campo donde la edad realmente no es un impedimento. Si sabes vender y tienes carisma para convencer a la gente, el éxito puede llegar sin importar cuántos años tengas.

Te doy un ejemplo: he tenido jefes de tan solo 21 años. ¿Por qué llegaron a esa posición? Porque supieron venderse a la persona adecuada y demostrar que podían con el puesto. ¿Si eran buenos en lo que hacían? Para este blog, eso es irrelevante. Pero, para no dejarte con la duda… ¡eran excelentes!

Ahora, vayamos al otro extremo. También he visto a personas mayores de 45 años, a quienes les sería difícil encontrar trabajo en otras industrias porque, en muchas empresas, se suele discriminar a esa edad. Sin embargo, en ventas, no solo consiguieron trabajo, sino que ganaban muchísimo dinero, ahorrando para su retiro y viviendo cómodamente.

El riesgo que juega a tu favor

Si buscas generar ingresos y estás dispuesto a tomar el riesgo, la edad realmente no importa en este campo. Aquí es donde el esquema de “bajo comisión” juega a tu favor. Para las empresas, no hay pérdida al darte la oportunidad (salvo quizá algunos prospectos (leads), pero eso solo pasa si eres nuevo o pésimo vendiendo... ¡y eso también se arregla si te esfuerzas en aprender y mejorar!). Por eso, las puertas siempre estarán abiertas para quienes quieran intentarlo.

Eligiendo tu camino

Lo mejor es que tienes libertad para escoger qué vender:

• Un producto o servicio que te apasione.

• Algo con altas comisiones.

• Un trabajo con horarios flexibles.

• O incluso algo que ofrezca bonos atractivos.

Todas las empresas del mundo necesitan buenos vendedores. Si eres bueno, tendrás opciones para elegir y tu edad será completamente irrelevante.

Nunca estarás sin trabajo ni dinero

Aprender a vender te asegura que nunca te quedarás sin empleo ni ingresos. Es más, en muchos lugares, las ventas se pagan semanalmente, lo que puede sacarte de apuros rápidamente.

Te confieso que este esquema me ha salvado en más de una ocasión. La necesidad, cuando se maneja bien (sin rogar, mentir o presionar al prospecto), puede ser el impulso interno que necesitas para enfocarte y hacer las cosas de la mejor manera posible.

¿Qué tan bien puede pagar un trabajo bajo comisión?

Déjame darte una idea de lo rentable que puede ser un trabajo bajo comisión. No solo hablo desde mi experiencia, sino también de grandes vendedores que conocí a lo largo de mi carrera.

Imaginemos que vendes un producto de lujo o una casa, donde las cifras son grandes. Para este ejercicio, usaremos números claros: supongamos que vendes algo con un precio de 100,000 pesos y tu comisión es del 8%. Por cada venta, ganarías 8,000 pesos.

Ahora bien, con un porcentaje de cierre medio-bueno (digamos que cierras 3 de cada 10 prospectos), esto es lo que podrías generar:

• Por cada 10 prospectos, cerrarías 3 ventas, lo que equivale a 24,000 pesos.

• En la mayoría de los lugares, podrías tener al menos un prospecto al día. Con 20 días laborales al mes, eso serían 48,000 pesos al mes.

Ahora imagina:

• ¿Qué pasa si tienes más prospectos por día?

• ¿Y si tu comisión es más alta?

• ¿O si eres mejor vendedor y cierras más del 30% de tus prospectos?

¿Y si vendes menos?

Incluso en un escenario menos favorable, donde solo cierras 1 de cada 10 prospectos, ganarías 16,000 pesos al mes. Este monto es equivalente al salario promedio en México, y eso sería siendo inexperto (que no quiero confundir con malo).

Claro, si solo vendieras 1 al mes, probablemente no conservarías el trabajo por mucho tiempo. Pero esa cifra puede ser un punto de partida, ya que tú tienes el control para mejorar tu desempeño.

La oportunidad no tiene límites

Ahora imagina ganar ese dinero de forma constante, sin importar si tienes 21 años o 55 años. Lo único que necesitas es aprender, practicar, y siempre buscar mejorar tus habilidades.

Si quieres más consejos sobre cómo mejorar tus cierres o potenciar tu desempeño, no olvides revisar nuestros otros blogs, donde encontrarás estrategias que te ayudarán a superar cualquier escenario.

El Caso de Éxito Más Impactante en Ventas

Para mostrarte el otro lado de la moneda, quiero compartirte un ejemplo totalmente real del mayor éxito que he presenciado en mis casi 20 años de experiencia en esta carrera, que más que un oficio, es un arte.

Este vendedor trabajaba en la venta de casas con un valor promedio de 1,500,000 pesos, con una comisión del 4% por cada venta. Esto significa que ganaba 60,000 pesos por cada casa vendida. Ahora, aquí viene lo interesante: era un trabajo de medio tiempo, con un horario cómodo de 10 a.m. a 2 p.m.

Aunque en ventas siempre existe el riesgo de pasar meses sin cerrar nada (algo que ya hemos hablado en otros blogs), este vendedor era excepcional. Nunca vendía menos de una casa al mes, pero llegó a vender hasta tres casas en un solo mes, logrando 180,000 pesos en comisiones. Se rumorea que una vez vendió cinco casas en un mes, lo cual sería 300,000 pesos, aunque no puedo confirmarlo… ¡pero de que era una leyenda, lo era!

Lo más impresionante es que, en promedio, este vendedor ganaba más dinero que su jefe, quien tenía un salario fijo superior a 40,000 pesos mensuales. Sin embargo, su puesto bajo comisión y de medio tiempo le permitía superar ese ingreso cómodamente.

Historias como esta no son tan raras en el mundo de las ventas. En cada equipo de ventas hay al menos uno (o varios) master closers, esas personas que logran facturar a niveles impresionantes.

¿Qué esperas para ser tú el próximo master closer?

¿Aún necesitas más razones para aprender a vender? Aquí te doy una más:

Si Tienes Sueños de Ser Emprendedor

Si tu meta es tener tu propia empresa o convertirte en emprendedor, adivina qué: vas a necesitar vender.

• Vender tu modelo de negocio para convencer a posibles socios o asegurar un préstamo en el banco.

• Vender tu producto o servicio para destacar en el mercado.

Piensa en esto: ¿cuántos negocios con ideas y productos increíbles han fracasado por una razón tan sencilla como la falta de ventas? Millones.

Un ejemplo que tengo siempre en mente son los artistas: pintores, escultores y creadores con un talento increíble. ¿Qué pasa si no saben vender ni mercadear sus obras? Nunca logran el éxito en vida. Es cuando fallecen que alguien con habilidades de venta y mercadeo toma su trabajo, lo promociona y vende a precios altísimos. ¿El resultado? Sus piezas se vuelven famosas no solo por el talento detrás de ellas, sino porque un buen vendedor las posicionó en el mercado.

La Clave del Éxito en Ventas

Cualquier empresa, incluso aquellas con productos o servicios mediocres, puede sobrevivir y prosperar si tienen buenos vendedores. Ahora imagina lo que podrías lograr tú al dominar este arte.

¿Listo para empezar?

Spiffs y Bonos: Los Extras que Hacen la Diferencia

En la compañía donde desarrollé mi habilidad y pasión por el arte de vender, existía un incentivo que marcaba la diferencia: cada año se rifaba un coche entre los mejores vendedores. Para participar, era necesario facturar más de un millón de dólares anuales. ¿El resultado? Cada año vi a alguien llevarse el coche, y aunque nunca lo gané, me sentí profundamente realizado al ver mi nombre en la urna en varias ocasiones.

Este es solo un ejemplo de los beneficios adicionales que muchas empresas ofrecen a sus vendedores para incentivarlos. Los spiffs y bonos son parte de este mundo.

Recuerdo un día en el que llegué tarde al trabajo y no me enteré de que el jefe había lanzado un spiff: "A quien logre la venta más grande hoy, le damos 10,000 pesos en efectivo." Sin saberlo, trabajé mi jornada normal y logré cerrar la venta más grande del día. Al día siguiente, me llamaron a la oficina y me entregaron un fajo de billetes. La sorpresa fue enorme, y en ese momento recordé cuánto amo esta carrera. Aún conservo el papel que envuelve los fajos de dinero del banco como un talismán de buena suerte.

Y no solo era eso. También había incentivos como:

• "El vendedor con más ventas este mes se lleva..." (dinero, gadgets, etc.).

• "El mejor vendedor del año se gana un viaje."

Si sabes vender y contribuyes significativamente a las ganancias de la empresa, no solo no te dejarán ir, sino que reconocerán tu esfuerzo. Ese reconocimiento, además del dinero, es un gran beneficio en sí mismo.

La Venta Como un Arte, No una Ciencia

Como hemos mencionado en otros blogs, aprender a vender no tiene escuela ni clases formales. Es un arte que se domina con la práctica. Si tienes suerte, puedes encontrar recursos, mentores o capacitación; pero en su mayoría, el aprendizaje viene de la experiencia:

• Ventas fallidas.

• Prospectos mal gestionados.

• Errores por falta de preparación.

Por eso decidí formar esta academia: para compartir todo el conocimiento que he acumulado durante años. Este aprendizaje no solo me costó tiempo, sino también inversión en:

• Cursos de los mejores vendedores.

• Seminarios, diplomados y libros.

• Experiencias en la vida real, con éxitos y fracasos.

La Otra Cara de la Moneda

Es cierto que un trabajo bajo comisión tiene sus retos. Podríamos hablar de temas como la falta de nómina fija, seguros o IMSS, y también de la importancia de organizar e invertir esas grandes cantidades de dinero. Pero este blog no trata sobre eso, lo dejo como nota para que consideres el otro lado de la moneda.

Porque si algún día tu mayor problema es no saber qué hacer con tanto dinero, sabrás que valió la pena tomar este camino. El primer paso está en tus manos.

¡Aprender a vender es fácil y te cambia la vida!